Cuando
desperté aun dormías o quizás solo tenías los ojos cerrados, me acurruque en
tus brazos para escuchar el latido de tu corazón. Comencé a “amasar” tu pecho, entonces abriste los ojos y acariciaste
mi cabeza, la moví para frotarla con tu
mano.
Me
agrada mucho besar y lamer los dedos de tu mano, pero morderlos es aun mejor!!!,
me detuviste con un buen azote y no dude en quejarme a la vez que me alejaba un
poco.
Quisiste
acariciarme pero ese azote hizo que me pusiera de orgullosa y no iba a dejar
que unas caricias me convencieran para acurrucarme de nuevo a tu lado, sin
embargo, cuando lo haces tienes un toque especial que hizo que lo hiciera, esta
vez con un suave ronroneo.
Nuevamente
frote mi rostro en tu palma y poco a poco baje hacia tu pecho, mis patas
nuevamente comenzaron a amasar tu cuerpo, sin poder evitarlo lo hice cada vez más
fuerte, suavemente me decías “no…” mientras acariciabas mi espalda; evitaba
hacerlo por un rato y de nuevo volvía a hacerlo fuerte, hasta que recibí otro azote. Yo te respondí con un rasguño que hizo que te quejaras “que no!!!” me
dijiste con voz firme y te levantaste.
Me ordenaste quedarme ahí mientras ibas a la cocina, espere pacientemente pero
no me agrada esperar mientras tu quien sabe que haces. Regresaste y traías un
plato con deliciosa comida, de inmediato comencé a pedirla restregando mi
cuerpo en tus piernas y maullando pero solo te limitabas a decir “espera…
espera…”
¿Esperar?
…. No !!! Eso no se me da, así que me pare en las patitas traseras y mientras
con las otras te pedía dármela, sonreíste y acariciaste mi cabeza. Bajaste el
plato y era uno de mis postres favoritos, como agradecimiento bese tus pies y
cuando estaba a punto de comenzar a comer, colocaste mi cadena “no, aun no”
Ña ¡!! Como que no? …. Intente comer de nuevo y jalaste la cadena, lo que provoco
que me sentara. Te observe pidiéndote con
la vista que me dejaras comer “antes quiero jugar con mi gatita”. Bueno esa
idea me agrada más que comer …. Bueno igual ambas cosas me agradan xD
Sacaste de la bolsa de tu pantalón una pequeña pelotita con un cordón,
comenzaste a menearlo para que tratara de atraparlo, solo que cada vez que
estaba a punto de lograrlo la levantabas para que no pudiera lograrlo, después
de un ratito tomaste mi cadena y comenzaste a caminar. Trate de regresar al plato pero me jalaste de
nuevo…. “no aun no….”
Mientras
caminabas trataba de seguirte e imaginar que seguía ahora, ese rico plato de
comida me llamaba y tu solo tenías mas ideas que no lograba definir. Paraste en
la sala y prendiste la televisión, te sentaste en el sillón, me subí a tu lado.
Mirabas la tele mientras me acariciabas, pero de repente dejaste de hacerlo, así
que comencé a llamar tu atención para que lo siguieras haciendo, pero el
programa al parecer te interesaba mucho así que decidí enterrarte las uñas y
morderte.
Logre
llamar tu atención, pero también que me azotaras de nuevo y esta vez fueron
varias veces y duramente un tiempo prolongado, aunque me quejaba no parabas de
hacerlo y solo escuchaba tus regaños sobre lo que no se debe hacer.
Terminaste,
me ordenaste quedarme ahí. Fuiste a la habitación, pensé que traerías el plato
de comida!!! Pero trajiste una cobija, la colocaste en una esquina, me llevaste
hasta ella “aquí te quedas hasta que te
llame”. O.o nooo!!! Como….????. Regresaste a tu sillón e intente seguirte pero
diste vuelta y con la simple mirada entendí que debía quedarme donde me
dejaste.
Mulle
varias veces pero parecía que no escuchabas, maullé más fuerte y quise
aventurarme a acercarme hacia ti, te levantaste del sillón y comenzaste a
quitarte el cinturón. Eso no era una buena señal así que decidí acostarme a
esperar, no paso mucho tiempo para que me quedara dormida.
De
repente sentí que me acariciabas la cabeza, abrí los ojos y sonreí al verte, bese
tu mano. Jalaste mi correa y fuimos hacia la habitación, me acercaste el plato
de comida y me ordenaste comer; comencé a hacerlo felizmente. Mientras lo hacía
acariciabas mi espalda, nalgas y piernas, eso me agradaba; pero cuando tus
dedos comenzaron a tocar mi entrepierna deje de comer. “sigue comiendo que
jugare contigo mientras lo haces”.
A
pesar de que trataba de comer, lo que hacías conmigo hacia que en ratos dejara
de hacerlo pero siempre un par de azotes me recordaba lo que debía hacer
mientras tú te divertías. Termine de comer y permanecí en esa posición hasta
que dejaste de tocarme y acariciarme, los ronroneos que salían de mi
demostraban que lo disfrutaba.
Terminaste y jalaste mi correa, subimos a la cama y besaste mi frente; regrese la acción besando tus manos…
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