domingo, 26 de junio de 2011

Cuentos de hadas

A muchos sino es que a todos, cuando éramos pequeños con contaban o leían cuentos de hadas, donde la princesa era rescatada de la torre donde yacía encerrada, despertada con un beso después de ser hechizada por una bruja o una princesa que después de besar a un sapo, este se convertia en su príncipe azul.


Conforme vamos creciendo, nos vamos dando cuenta que esas historias solo suceden en los cuentos de hadas, ese tipo de princesas y príncipes no existen, las varitas mágicas y los deseos cumplidos al momento solo embellecen la historia; nada es real. Solo son relatos para alegrar y echar a volar la imaginación.


También conocemos historias actuales donde “plebeyas” se casan con príncipes, donde al parecer ellas si tuvieron un cuento de hadas. Tienen bodas que el día que acontecen es lo más visto a nivel mundial, todos los ojos – o gran parte de ellos- están puestos en “esa boda”.


Mi cuento de hadas, mejor dicho, el que quiero que sea mi cuento de hadas [en este momento] es diferente….


Yo no quiero entontar un príncipe, no necesito ser rescatada de ningún lado; se valerme por mi misma, soy independiente en la mayoría de los aspectos y disfruto mi vida laboral, profesional y familiar. No sueño con un príncipe de ojos azules, tez clara y vestimenta glamurosa, no quiero vivir en un castillo lleno de servidumbre.


Cuando comencé a sesionar solo me interesaba el spank disciplinario, me agradaba jugar roles y tener castigos reales, disfrutaba en cada sesión y siempre terminaba alegre. Ahora mi cuerpo y mente ahora piden más, aunque el spank disciplinario me sigue encantando, ahora quiero y deseo comenzar a jugar spank erótico.


Ya lo he jugado, en algunas cuantas ocasiones, tiene un grado de satisfacción totalmente diferente al disciplinario; tiene otras connotaciones y se disfruta de diversas maneras. Lo malo es que tiene meses que no juego este tipo de spank, por diversas cosas que no vienen al caso.


He tenido pareja estando en esto. Jugando a la vez con mi spanker de ese momento. Pero no disfrutaba en pleno a mi pareja; por qué no me complementaba del todo. A su vez el spank deje de disfrutarlo como lo hacía, porque el que sea disciplinario no le quita el grado de sexualidad que engloba y ese, ese pequeño detalle era lo que no me dejaba vivirlo al máximo.


Mi cuento de hadas es, en pocas palabras, encontrar a una pareja donde me complemente en todos los sentidos. Sé que lo que me gustaría es difícil de encontrar, de eso estoy consciente; pero anhelo en este momento tener una pareja donde me complemente íntegramente, incluido este… el spank y todo lo que trae consigo.

No creo ser que única que tiene esta ilusión…. ¿o sí?